¿Qué es lo que nos hace distintos unos a otros? ¿Es nuestro físico? ¿Son nuestras facciones? ¿Es nuestra clase social? ¿O nuestro color de piel? ¿Has pensado alguna vez en la manera en que tu color de piel te condiciona en tu día a día? Quizás si te encuentras en una sociedad en la que tu color se corresponde con el de la mayoría normativa no te lo hayas planteado pero, en un mundo en que el racismo y los estereotipos generados a partir del concepto de raza siguen muy presentes, tu tono de piel puede condicionar tu día a día. Gran parte de la sociedad sigue estando muy segregada por el acceso a las oportunidades basadas en el género, la raza o la clase social. Es por eso que la artista brasileña afincada en Madrid, Angelica Dass, ha dado un paso al frente con su proyecto fotográfico Humanae, en el que redefine el significado de lo que entendemos como bello a día de hoy y cuestiona los prejuicios raciales derivados de nuestro color de piel.
En un mundo en que el racismo y los estereotipos generados a partir del concepto de raza siguen muy presentes, tu tono de piel puede condicionar tu día a día.
El proyecto Humanae surgió en 2012 cuando la artista estaba realizando un máster en fotografía. Anteriormente había trabajado en el ámbito comercial, pero volvió a estudiar con la intención de cambiar la manera en la que fotografiaba. Dass nació y creció en una familia muy diversa en la que la mezcla de colores era algo completamente habitual. «Nací en una familia llena de color. Incluso si parezco negra, también soy blanca y nativa de la India», comentaba la fotógrafa a propósito de ello en una entrevista con 52 Insights. Empezó fotografiando a su círculo más cercano de amigos y familiares casi como una necesidad personal, pero poco a poco fue extendiendo su trabajo a un público más amplio, fotografiando otras tonalidades de piel.
Angelica Dass: Nací en una familia llena de color. Incluso si parezco negra, también soy blanca y nativa de la India.
Con la idea de establecer una clasificación libre de connotaciones o prejuicios, Dass escogió como referencia la paleta de colores de la guía Pantone, el sistema de definición cromática más reconocido hasta la fecha. «Desde mi experiencia, el sistema Pantone era una escala neutral, donde ningún color tiene más importancia que otro», afirmaba Dass durante una entrevista con i-D. Desde que empezó el proyecto, más de 4.000 voluntarios de 17 países y 27 ciudades distintas han participado en Humanae independientemente de su clase, género, origen o color. Todas las imágenes siguen el mismo riguroso sistema de realización: fondo correspondiente con el color de piel, expresión neutra y retrato hasta los hombros, eliminando la falsa concepción de razas superiores e inferiores.
Todas las imágenes siguen el mismo riguroso sistema de realización: fondo correspondiente con el color de piel, expresión neutra y retrato hasta los hombros, eliminando la falsa concepción de razas superiores e inferiores.
Angelica Dass: Estamos convirtiendo a las personas en clones y esto es algo muy doloroso para muchas adolescentes que quieren encajar en este ideal inalcanzable.
Previamente a sus proyectos personales, Dass ha trabajado como fotógrafa para publicaciones del nivel de GQ, Glamour o Marie Claire. En la anteriormente mencionada entrevista para 52 Insights, la fotógrafa hablaba sobre los ideales nocivos que siguen imperando en las revistas de moda: «Seguimos creando estereotipos perjudiciales. No sólo respecto a la piel o la belleza sino también por la idea que creamos sobre cómo tiene que ser el cuerpo. Estamos convirtiendo a las personas en clones y esto es algo muy doloroso para muchas adolescentes que quieren encajar en este ideal inalcanzable y también para el resto de la sociedad. Las personas que quieren trabajar conmigo saben que no les haré parecer una Barbie». Quizás sea eso lo que atrae a la gente de la obra de Dass: son individuos reales sin retoques posteriores que muestran su naturalidad en su estado más puro. Con Humanae, Angelica ha participado también en un TED Talk de 2016, ha ocupado diversos museos de todo el mundo, espacios públicos… E incluso llegó a ser portada de la revista Foreign Affairs. Más allá del buen reconocimiento mediático del que goza, el proyecto también se ha usado como herramienta de estudio genético para el museo Leonardo Da Vinci de Milán, en la sección de genética, y ha servido a muchas escuelas de primaria para trabajar el tema de la diversidad. De una forma absolutamente sincera y honesta, la obra de Dass anima al espectador a reconocer y abrazar las diferencias como lo que son: algo positivo que nos hace únicos y especiales.
Fuente: itfashion